Distintos artistas, científicos y estudiosos, inician el transitar por su obra, con una estricta observancia de la Naturaleza y sus distintos y variados componentes. Para no desentonar y si seguir los pasos de estos dignos predecesores, iniciemos estas líneas hablando de un ícono de la tradición humana, la imagen asociada a la fortuna…, el Trébol de IV hojas!!!
La Botánica nos define a los Trifolium, como un género que comprende cerca de CCC especies o plantas de la subfamilia faboideas, comúnmente conocido como Trébol, tal y como se infiere de su nombre científico, la principal característica radica en contar con III folios, pétalos, lóbulos u hojas… La tradición sociocultural egipcia y celta, por mencionar culturas de reconocida antigüedad, otorga a la presencia de IV folios en lugar de III, un simbolismo mágico, que se traduce a lo menos en buen augurio y protección…!!!
La ciencia se empeña en “catalogar” como una mutación o fallo en la genética de una planta, lo que genera la existencia de IV folios, que pudieran fácilmente ser más, incluso el libro Guinness identifica como XXI el máximo número de hojas presentes en un trébol. Una afirmación interesante de analizar a la LUZ de la expresión de A. Einstein, “Dios no juega a los dados…”, según la cual se puede concluir que TODO tiene su razón de ser o finalidad, en este Universo de las Apariencias, inmerso en la Armonía del Caos…
Aunque para algunos, la suerte radica "realmente" en lograr ubicar y obtener un Trébol de IV hojas, puesto que la ciencia nos señala que su existencia es de I por cada decena de mil con III hojas, en una tradición mayoritariamente asociada a la cultura Celta-Irlandesa, el cruzar nuestro camino con la presencia de un Trébol de IV lóbulos, es símbolo inequívoco de un momento de buena suerte, y el mantener consigo este singular producto vegetal, nos generará protección en el campo del Amor, la Economía e incluso la Salud Mental…!!! Pero no solamente esto, hablamos de formas y figuras, y aplicando la observación, la asociación y el re-cuerdo, “fácilmente” podríamos decir que la imagen del trébol de IV pétalos, evoca a la vez la de una mariposa, integrante esta del Reino Animal, con implicaciones mágico/psicológicas, relacionadas con la condición humana, su transitar y paso del cuerpo material, al alma…
Si continuamos con el ejercicio de observación, asociación y re-cuerdo, existen otras figuras geométricas que suelen o pueden ser relacionadas con la imagen de este singular trébol, tal y como la de la Cruz de Malta y la Cruz Celta, veamos…
Una imagen particular de una cruz, la obtenemos al girarla XLV grados…, el plano cartesiano muta para convertirse en una “X”…
Manteniéndonos siempre dentro de la asociación geométrica, en el campo de las Matemáticas, contamos con la Transformación Moebiüs, una fórmula matemática utilizada para estudiar y mostrar la relación Plano – Esfera, y se encuentra entre los más fundamentales trazados geométricos, con aplicaciones que van desde el mapa cerebral hasta la teoría de la relatividad. En general, una transformación de Moebiüs es cualquier combinación de estos cuatro movimientos básicos, las simples traslaciones, las dilataciones, las rotaciones y las inversiones. Las líneas rectas permanecen rectas o se convierten en circunferencias, y las perpendiculares se mantienen. La auténtica unidad de las transformaciones de Moebiüs nos es revelada al subir una dimensión (pasar del plano al espacio), utilizando la proyección estereográfica del plano sobre una esfera, que nos genera IV lóbulos…, IV pétalos en el plano cartesiano...!!!
Transformación Moebiüs
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